viernes, 25 de febrero de 2011

El obispo leproso. (Gabriel Miró)

En esta obra se refleja la vida en Oleza, un pueblo que está inspirado en Orihuela (uno de los lugares donde vivió el autor). Entre todas las historias que se van enlazando, la más destacable es la de Pablo. Este es un niño al principio de la historia pero con los acontecimientos va madurando. Al comienzo se decide que Pablo sea internado en un colegio jesuita, allí esté algún tiempo hasta que termina sus estudios de bachiller. Después continúa en una escuela de su pueblo donde conoce a Mº Fulgencia, ambos mantienen una relación hasta que son descubiertos por el sobrino del marido de ella. Tras este suceso se marchan del pueblo, ellos y otros personajes. Al final todo el pueblo ha envejecido lentamente, pero también ha abierto sus puertas al exterior con la construcción del ferrocarril.
Esta obra no me ha sido agradable de leer por su dificultad y su lentitud, a pesar de esto, después de su riguroso estudio y tras las conclusiones de todos los trabajos, hay que destacar el talento del autor para insinuar las cosas y relacionar todas las historias. Creo que es un libro complicado, pero que contiene gran cantidad de recursos complejos y descripciones que son necesarios analizar. Como conclusión puedo decir que no es un libro para disfrutar de su lectura, sino para leerlo despacio y con mucha atención.

domingo, 20 de febrero de 2011

Poema de Jorge Guillén.

                                                   El mar es un olvido


El mar es un olvido,
una canción, un labio;
el mar es un amante,
fiel respuesta al deseo.
Es como un ruiseñor,
y sus aguas son plumas,
impulsos que levantan
a las frías estrellas.
Sus caricias son sueños,
entreabren la muerte,
son lunas accesibles,
son la vida más alta.
Sobre espaldas oscuras
las olas van gozando
.

Jorge Guillén es uno de los autores españoles más destacados de la Generación del 27. Recibió el máximo reconocimiento de las letras españolas, el Premio Cervantes, en 1976.
La producción poética de Jorge Guillén está recogida bajo el título de Aire Nuestro, que consta de cinco obras: Cántico, Clamor, Homenaje, Y otros poemas Final. Desde la primera edición, de 1928, con 75 poemas, Cántico ha ido ampliándose hasta alcanzar las 334 composiciones que constituyen la cuarta y definitiva edición, de 1950. Cántico es una exaltación de la perfección del Universo. Jorge Guillén afirma: "el mundo está bien hecho”. Cántico se subtitula Fe de vida. Clamor, compuesto por Maremágnum (1957), Que van a dar en la mar (1960) y A la altura de las circunstancias (1963), es el contrapunto de Cántico y lleva por subtítulo Tiempo de historia. Los poemas de esta obra son un grito de protesta ante las dolorosas realidades de nuestro tiempo: guerras, dictaduras, injusticias, negocio, tiranía, muerte, explotación, etc. Jorge Guillén dice ahora:"El mundo del hombre está mal hecho". A estas dos obras añade Guillén un tercer titulo: Homenaje, al que pertenece Reunión de vidas (Milán, 1967), conjunto de poemas dedicados a diversas figuras de la Historia, de las Artes y de las Letras. Y tras las dos ediciones de Y otros poemas (Buenos Aires, 1973; Barcelona, 1979), la obra completa de Guillén se cierra, definitivamente, con Final (Barcelona, 1981).
El poema El mar es un olvido… pertenece a Que van a dar a la mar…, el segundo libro de Cántico . El título de esta obra está tomado de un verso de las famosas Coplas de Jorge Manrique a la muerte de su padre. Es un libro compuesto por una serie de meditaciones sobre el pasado, los recuerdos, el paso del tiempo, la muerte…, el tono es melancólico y nostálgico.
Es un poema compuesto por cuatro estrofas, tres de cuatro versos y una de dos, son versos libres y heptasílabos, la musicalidad la consigue a través de diversas figuras literarias como: el paralelismo entre los versos 1 y 3 y  la anáfora que existe entre los versos 11 y 12.
El tema que se desarrolla en este poema es la muerte y está reflejado en el símbolo del mar, como podemos observar, ya desde el principio, en la metáfora del título. Aparecen diversas figuras que explican esta relación entre el mar y la muerte en todo el poema. La metáfora que aparece en el verso 9 (“ sus caricias son sueños, / entreabren la muerte, / son lunas accesibles, / son la vida más alta.”), explica como las caricias del mar son sueños que conllevan a la muerte. Hay una sinécdoque en el verso 13 en la que utiliza el término “espalda” para referirse a los hombres en general y para explicar que todos nos tenemos que morir (“sobre espaldas oscuras, / las olas van gozando.”). Además, podemos observar un símil en los versos 5 y 6 en el que se comapra el mar y un ruiseñor, sus aguas con las plumas, relación que podemos interpretar como que todo vuela, que todos vamos a ascender hacia el cielo, hacia las frías estrellas. También hay varias personificaciones, el mar y sus aguas tienen cualidades humanas, podemos apreciar una muy clara en el último verso (“las olas van gozando.”). Estas personificaciones le sirven al autor para hacer más cercana la idea de la muerte, más humana.
En El mar es un olvido… el autor consigue describir cómo nos llega la muerte poco a poco y cómo todo se va convirtiendo en un recuerdo que al final olvidamos. Es destacable la musicalidad que se consigue a lo largo del poema sin que los versos rimen y el hecho de que la última estrofa solo tenga dos versos podemos identificarlo como que ha llegado el final, que cada vez el tiempo que queda es menos.